Campaña al Parlamento Europeo Reglamento de produccion y comercialización de semillas

Nos encontramos en una encrucijada para el futuro de nuestros alimentos: la UE está negociando actualmente nuevas normas para el mercado de semillas. Las normas actuales, introducidas en la década de 1960, promueven semillas desarrolladas para la agricultura industrial. Semillas que pueden venderse junto con pesticidas nocivos y fertilizantes sintéticos, y cultivarse en monocultivos. La agroindustria está presionando para que las reglas vayan aún más lejos, y terminen en la práctica acabando con la biodiversidad de los cultivos para hacer que tanto el sistema de semillas como el de alimentos sean aún más uniformes.

Lo que necesitamos es exactamente lo contrario. Necesitamos leyes de semillas que garanticen nuestro derecho a alimentos sanos, diversos y sabrosos, mejorando realmente la diversidad en nuestros campos y huertos, apoyando las variedades locales y respetando los derechos de las personas que se dedican a la agricultura.

La nueva reglamentación de semillas de la UE que se está tramitando en el Parlamento Europeo amenaza la conservación y uso de la biodiversidad cultivada. Ignora el derecho de los agricultores y agricultoras a cosechar, utilizar, intercambiar y vender sus propias semillas, en contra en los acuerdos internacionales suscritos por la Unión Europea y sus países miembros y por eso nos parece inaceptable.

Desde hace unos meses hemos participado en una campaña pidiendo al Parlamento Europeo y a las personas titulares de los Ministerios de Agricultura para que revisen la propuesta de ley de semillas de la UE y adopten una legislación que permita la circulación de semillas de variedades campesinas con alta biodiversidad, respete los derechos de los agricultores y agricultoras y siente las bases para un sistema alimentario sostenible, resiliente y diverso. Esta campaña está empezando a dar algunos frutos.

El próximo 24 de abril de 2024, el Parlamento de la UE votará el Reglamento sobre materiales de reproducción vegetal en el que se incluyen enmiendas introducidas por la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo que tiene elementos menos lesivos de cara a la conservación y gestión dinámica de la biodiversidad cultivada (enmiendas 36 y 155) que afectan a los artículos 2 y 29 del futuro Reglamento. Por ejemplo, el Comité AGRI propone en sus enmienda 35 y 36 excluir del ámbito de aplicación de la legislación

1) el material de reproducción vegetal vendido o transferido para actividades de investigación en explotaciones y bancos de germoplasma; y 2) el material de reproducción vegetal al que se acceda, venda o transfiera de cualquier forma en pequeñas cantidades con fines de conservación dinámica.

Además, en su enmienda 155 propone permitir a los bancos comunitarios y redes de semillas la venta de variedades no registradas por encima de las cantidades anteriores a agricultores profesionales.

Aunque siguen existiendo importantes barreras en este nuevo texto presentado, entendemos que merece la pena apoyar el compromiso alcanzado por el Comité AGRI del Parlamento, ya que podría permitir avanzar en el camino propuesto por el Pacto Verde Europeo y es mas respetuoso con los marcos jurídicos internacionales de los que nos hemos dotado, como el Tratado Internacional de los Recursos Fitogenéticos para la Agricultura y la Alimentación, el Convenio sobre la Diversidad Biológica y el Derecho Humano de las personas que se dedican a la agricultora a intercambiar y vender sus propias semillas y otros MRV, consagrado en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los campesinos y otras personas que trabajan en zonas rurales (UNDROP) de 2018.

Por ello, con el objetivo de incidir en la votación hemos redactado y enviado una carta y un informe a los eurodiputados/as españoles para que apoyen las enmiendas y sigan trabajando facilitar la comercialización de semillas de variedades diversas y adaptadas localmente por parte de los y las productores locales de semilla; fomentar la conservación y gestión dinámica que realizan bancos comunitarios y redes de semillas; y respetar y promover los derechos de los agricultores y agricultoras a cosechar, utilizar, intercambiar y vender sus propias semillas.

Os recordamos que sigue abierta la campaña ¡Levantemos nuestros tenedores! A ver si le podemos dar un empujón antes de la votación, ya hay más de 107.000 firmas!

¡Firma la petición para pedir a los responsables de la toma de decisiones de la UE que no sucumban a la presión de la industria, sino que protejan y promuevan la diversidad de cultivos, así como el derecho de los agricultores y agricultoras a cosechar, usar, intercambiar y vender sus propias semillas!

- La conservación y el uso sostenible de la diversidad de cultivos adaptados localmente debe ser una prioridad absoluta para los poderes públicos.
- Debe implementarse plenamente el derecho reconocido en los tratados internacionales a sembrar, cosechar, intercambiar y vender sus propias semillas por parte de las personas que se dedican a la agricultura.
- Debe facilitarse la comercialización de variedades biodiversas y adaptadas localmente por parte de los pequeños productores de semillas.
- Las nuevas variedades no deben aprobarse en función de su dependencia de los pesticidas ni de fertilizantes sintéticos.

Si formas parte de alguna organización, animamos a enviar la carta a los eurodiputados/as españoles.